Diciembre 14 de 2006
Aterrizaron en Colombia los tres primeros aviones Supertucano para la Fuerza Aérea
En junio, las tripulaciones colombianas de la Fuerza Aérea viajaron para revisar los últimos detalles. Además un grupo de pilotos recibió instrucción.Hacen parte de los 25 aviones que darán un mayor apoyo a las tropas en tierra en la lucha contra la guerrilla y los narcotraficantes.
Las aeronaves fueron recibidas el jueves por el Ministro de Defensa, Juan Manuel Santos en la pista de la base aérea de Catam, en Bogotá.
Su llegada se produjo un año después de cerrada la contratación directa con la empresa brasileña Embraer.
Las aeronaves hacen parte de un paquete de 25 que reforzarán la flotilla de combate de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC).
Los aparatos, cuyo costo total fue de 234 millones de dólares, tendrán, según el alto mando militar, impacto considerable en el conflicto interno colombiano, como en su momento lo tuvieron los helicópteros 'Arpía' y el avión 'Fantasma' para contrarrestar los ataques masivos de las Farc en Vaupés, Meta y Casanare.
Según el comandante de la FAC, general Jorge Ballesteros Rodríguez, los Supertucano tienen una autonomía de vuelo de 4 horas, lo que permitirá mayor cubrimiento de territorio. Esto, en términos prácticos, se traduce en apoyo rápido a tropas de superficie durante ataques y combates, precisamente uno de los puntos débiles de la Fuerza Pública.
"En los últimos años, las Farc cambiaron los asaltos masivos por los antiguos ataques de guerra de guerrillas, pero aún su táctica es actuar cerca de la Fuerza Pública y de la población civil, para evadir la reacción de la aviación militar. Con los Supertucano se verán obligados a cambiar de táctica, porque tendrán encima un avión con ametralladoras y bombas, que los vigila día y noche", dice Jorge Puentes, militar retirado y experto en aviación.
¿Cómo son los Supertucano?
Al recibir las aeronaves, el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, explicó que se trata de aviones de combate para operaciones de diferente tipo, acondicionados para piloto y copiloto, y con posibilidad de aterrizar y despegar en pistas pequeñas. Así mismo, poseen un timón con función de manos libres, que permite al piloto ubicar y destruir blancos sin distraerse.
Los nuevos aviones harán labores de interdicción contra el narcotráfico, a diferencia de los que operan actualmente, que son para entrenamiento. Para esta misión fueron acondicionados con tecnología de última generación, sensores para detectar aeronaves y personas, y realizar vuelos nocturnos. Dos más llegarán la próxima semana y otros 10 en el primer semestre del 2007. Los 10 restantes, a mediados del 2008.
El ensamble
1. El proceso de ensamble de los Tucano empezó el pasado mes de enero en Brasil. Hasta el momento son cinco los aparatos terminados.
2. En junio, las tripulaciones colombianas de la Fuerza Aérea viajaron para revisar los últimos detalles. Además un grupo de pilotos recibió instrucción.
3. La empresa Embraer se comprometió a entregar otros dos aviones la próxima semana; diez aviones más en el 2007 y los restantes en el 2008.
La puja por los aviones
La iniciativa de adquirir nuevos aviones de combate surgió en el año 2001, cuando el general Héctor Fabio Velasco era comandante de la Fuerza Aérea.
Sin embargo, antes de llegar a la decisión final de compra de los Supertucano, en octubre de 2004, se presentaron tropiezos en el camino, que iban desde desacuerdos por la conveniencia del modelo y tipo de avión hasta pujas por supuestos intereses económicos en la compra.
La primera desavenencia quedó al descubierto en noviembre del 2002, cuando fuentes de la Fuerza Aérea aseguraron que el Ministerio de Hacienda (a cargo en ese entonces del actual Mindefensa,Juan Manuel Santos) había parado el desembolso para la compra, porque no se había realizado una licitación.
En ese momento, la FAC contestó que invitaron a cinco empresas y solo Brasil se comprometió a entregar el aparato equipado.
Reparos antes de licitar
En su momento, Santos argumentó que se había parado el proceso de compra a principios del 2002 porque había informaciones sobre la decisión de comprar las aeronaves brasileras, sin aún empezar la licitación.
En ese entonces, Santos también señaló que un informe de un comité de inteligencia del Senado de Estados Unidos aseguraba que los Tucano brasileños no eran lo suficientemente rápidos para cumplir la función de interdicción, que era uno de los objetivos de la compra.
La ministra de Defensa de la época, Marta Lucía Ramírez, señaló que nunca supo de la preferencia por una propuesta específica.
Aclaró, además, que al llegar al Ministerio había enviado cartas a las embajadas de Brasil, Israel, Corea, Francia y Estados Unidos para asegurar una buena cantidad de oferentes en la convocatoria.
El enredo concluyó dos años después con la firma del ministro Jorge Alberto Uribe.
En la actualidad son 17 las fuerzas aéreas del mundo que poseen aviones Supertucano. Para Embraer, la empresa fabricante, esta es la primera exportación que realiza de aeronaves militares que sirven para diferentes misiones.
Fuente:
El Tiempo