GEOPOLÍTICA

[henriquecouceiro]

Concordo com voce Rafael, a questão dos empréstimos que levantou mostra bem o tipo de governantes que a região possui, as coisas parecem acontecer sempre a toque de caixa, sem planejamento e visão de longo prazo.

Espero que a UNASUL possa realmente estabelecer regras e ter capacidade de arbitrar questões como calote de dívidas de maneira independente, porém acredito que vai ser muito difícil... Em um exercício hipotético, vamos imaginar que já exisitisse uma corte arbitrária da Unasul, e que ela decidisse que o Equador devesse pagar o empréstimo em sua totalidade ao BNDES, voce consegue ver isso acontecendo??? Iria haver muita chiadeira por parte dos Bolivarianos. E se fosse o contrário? Se ela decidisse que o Equador tem o direito de não pagar a dívida, será que não pensaríamos que o Hugo Chaves poderia estar manipulando o resultado???

As picuinhas entre os Países e seus governantes são muitas e creio que esse é o maior problema. Não possuímos estadistas que estejam interessados em pensar nos seus próprios países, quanto mais no desenvolvimento da região!

Enfim ainda temos um longo caminho pela frente e que só mesmo o tempo irá dizer se a criação da Unasul trará benefícios reais para nossa região ou se ela ficará apenas como mais uma boa idéia que não deu certo.

Sds,
Henrique.

[rafafoz]

Ah você também levantou uma questão interessante que agora me veio em mente, a UE levou muitos anos até sair totalmente do papel, espero que não leve o mesmo tempo, e sim um período de tempo (bem) menor.

Na questão de leis, fica o impasse, muitos países terão que votar mesmo que não os beneficie, por seu modo de pensar ou agir (como o Equador, Bolívia, Venezuela, Paraguai), mas temos que ver que a AL não se baseia só nesses países, temos (eu acho) no nosso lado, Chile, Argentina, Uruguai, Peru (??) e Colômbia, além do Brasil. Somam 6 votos, mais que o lado opositor (no meu ver), mais tudo pode ser revertido, no caso da Bolívia (talvez não), do Paraguai, até do Equador. Isso poderia isolar a Venezuela, em questões de votos. O Brasil pode reverter isso (ta to imaginando isso ).

As leis seriam o maior impasse para a Unasul, com leis poderia se criar mecanismo que obrigaria o país devedor a pagar, ou ir a corte. Imagino que se o país devedor tiver reservas no valor do empréstimo, isso seria de certo parte viável, caso não pague, o Banco de Fomento congela as reservas externas do país, sendo amparado pela legislação da Unasul. Ai sim tornaria viável, não vejo isso como impossível de ser aceito em uma futura legislação, pois caso isso não aconteça todos os países pagariam a conta, e ninguém iria querer isso não é mesmo, então pra mim, ah soluções, desde que seja cumprida, pois do jeito que ah corrupção (o que pra mim é o maior problema da AL) poderia acabar dando alguma *****.

Em relação a esse banco, a Venezuela se disponibilizou a ser sede, então fico imaginando se a Venezuela, não aceite ou acate alguma decisão e o Hugo Chávez decide fechar e apoderar-se do Banco. Pra mim esse banco ficaria mais seguro em um país como o Chile ou o Brasil, Uruguai, não sei tenho minhas dúvidas, pois e um país que tem seus problemas de lavagem de dinheiro, e a Argentina falida, me da até medo. Colômbia e Bolívia com seus problemas internos também são um risco, assim como a parte diplomática Equatoriana também deixa a desejar por suas atitudes, sobrou o Peru, que em minha opinião desconheço seus problemas.

[ciclope]

Eu acho que a sede do banco deveria ficar no Chile ou aqui no Brasil.
Se bem que no Brasil eu acho meio difícil por que já temos a sede do parlasul. Nesse caso o melhor e o Chile, pois é um país estável.

[jauro]

Adelanto del Balance Militar de América del Sur 2008
http://www.nuevamayoria.com/index.php?o ... &Itemid=30
Nueva Mayoria.

[ciclope]

Que belo ducumento de comparação de forças. Esperemos mudar essa situação em breve com o investimentos necessários para colocar as nossas forças armadas a altura do brasil.

[rafafoz]

Mais da pra ver que o Brasil tem que melhorar muita coisa ainda, para ser a maior potencia militar da região, tem certos aspectos que se não fica abaixo do nível, iguala com muita dificuldade.
Mais alguns anos espero que esses gráficos estejam todos, com o Brasil no topo, se tudo der certo.

[Marino]

Nueva Mayoria:

Washington, Brasilia y Buenos Aires con Obama
Ene-01-09 - por Rosendo Fraga

La buena relación entre los EEUU y Brasil no es un hecho nuevo. Ya un siglo atrás, el Barón de Rio Branco -el gran artífice de las relaciones exteriores brasileñas- señalaba la importancia de cuidar esta relación bilateral, en momentos que Argentina la privilegiaba con el Reino Unido.

El alineamiento brasileño con los aliados en la Segunda Guerra Mundial -mientras la Argentina asumía una postura neutralista- profundizó la alianza Washington-Rio de Janeiro, que en esos años era la capital de país.

Ya a comienzos de los años setenta, en la época de los gobiernos militares, un secretario de Estado republicano como Henry Kissinger proclamaba que Brasil era el "país llave" con el cual había que entenderse en América del Sur, delegándole el liderazgo regional.

Los EEUU se encuentran probablemente con el menor liderazgo político global desde la Segunda Guerra Mundial, mientras que Brasil, al mismo tiempo, pasa por el momento más brillante de su rol internacional, posiblemente de toda su historia.

Esto ha generado un interés común entre los dos países. Es que el liderazgo regional brasileño hoy es funcional a EEUU, que enfrenta crisis en diversos lugares del mundo, siendo su poder desafiado en una forma sin precedentes en las últimas décadas.

Es así como la creación del Consejo de Seguridad de América del Sur, iniciativa brasileña para crear una estructura de defensa regional sin Washington, fue elogiada desde esta capital. A ello se suma que la recientemente iniciada Cumbre de América Latina y el Caribe, integrada por todos los países del continente, exceptuando sólo a EEUU y Canadá, fue aceptada públicamente por Condoleezza Rice, quien sostuvo que no veía incompatibilidad entre ella y la OEA. Que hoy Brasil elija a Francia como su socio en materia de tecnología militar, en otro momento hubiera generado suspicacias en Washington, pero ahora es aceptado sin reparo alguno.

En lo político, si un presidente brasileño de centro-izquierda como Lula ha llegado a una relación optima con los EEUU, con el presidente republicano más ideologizado desde la Segunda Guerra Mundial, lo lógico es que con un Presidente demócrata más moderado esta buena relación no sólo se mantenga sino que incluso progrese.

Por todas estas razones, la combinación del primer presidente afro en los EEUU con el primer presidente obrero en Brasil puede no sólo ser un dato eficaz para la política regional, sino también para la diplomacia global.

Mirando al largo plazo, el reciente hallazgo de recursos petroleros en Brasil -más allá de la baja circunstancial del precio del barril- consolida la posición de este país como líder en América del Sur, reforzando su objetivo de ser el único país de la región con vocación de actor global.

Su intención estratégica es clara: ser una de las cuatro potencias emergentes del siglo XXI junto con China, India y Rusia, con los cuales conforma la sigla BRIC, denominación con la que se denomina a los cuatro países en los mercados internacionales. En la reciente visita del Presidente Medvedev a Brasil, Lula obtuvo un éxito importante: la convocatoria de la primera cumbre de presidentes de las cuatro potencias emergentes que tendrá lugar en Rusia en 2009.

Las dos potencias asiáticas son importadoras de petróleo, mientras que la tercera es exportadora, y con el hallazgo reciente Brasil se proyecta también como un país con excedente en un mundo en el cual probablemente la energía tendrá cada vez más valor en el largo plazo.

En América del Sur, Brasil -que es la mitad de los doce países que la integran por PBI, población y territorio- hasta comienzos del siglo XXI era un neto importador de petróleo, lo cual significaba una vulnerabilidad.

Ello representaba una desventaja frente a Venezuela, el mayor exportador de la subregión, y respecto a la Argentina, que se auto-abastecía y tenía márgenes para la exportación.

Pero la falta de inversión energética en nuestro país lo puede hacer importador de petróleo en el mediano plazo, e incluso antes que cumpla su Bicentenario, al mismo tiempo que Brasil pasará a ser exportador.

Es una manifestación más de un país que tiene estrategia de largo plazo y otro que carece de ella, absorbido por las urgencias del corto plazo.

Históricamente, en la Argentina siempre han existido dos tendencias respecto a Brasil. Una buscó la conciliación y evitó el conflicto, como fueron los casos de los presidentes Roca, Justo, Perón, Frondizi, Alfonsín y Menem. Otra, más nacionalista, vio a Brasil primero como el adversario o competidor regional y más tarde, cuando Argentina perdió posiciones relativas, como una amenaza. Como en otras cuestiones importantes, la opinión argentina no ha sido homogénea respecto a Brasil.

El problema es que un siglo atrás había una relación de equilibrio o de ventaja para Argentina, y en cambio hoy el PBI brasileño es cuatro veces el argentino. La cuestión es que todavía sectores de la dirigencia argentina ven a Brasil como si fuéramos el país del pasado que podía competir con él y no el del presente, que en realidad es un país mediano y no grande. Este es el tipo de percepción que subyace en la diferencia respecto al Consejo de Seguridad de la UN.

Pero tampoco pueden compararse las relaciones de EEUU con México y Canadá, con la de Brasil y Argentina. El primero es nueve veces México y seis veces Canadá en términos de PBI. En cambio Argentina, pese a su caída relativa, sigue siendo la segunda economía de América del Sur y el que sigue a Brasil. Más bien podría compararse la relación que Italia o España pueden tener con Alemania.

En lo que hace a la compra de empresas argentinas por brasileñas, hasta el momento esta inversión en la Argentina no ha generado reacciones negativas. Hacia el futuro es difícil pronosticar qué sucederá. El nacionalismo argentino es intermitente y cíclico, no es un sentimiento permanente. No puede descartarse en el futuro algún tipo de reacción de sectores nacionalistas argentinos respecto a Brasil.

En la política regional hay sectores del Gobierno que plantean la necesidad de un eje Buenos Aires-Caracas para contener la influencia de Brasil y algo de eso sucede hoy en la política exterior argentina, que parece buscar un equilibrio oscilante entre Brasilia y Caracas, en los últimos tiempos quizás más volcada hacia la capital venezolana.

Respecto a la competencia por el liderazgo regional entre Argentina y Brasil, históricamente el segundo apoyó a Uruguay en conflictos con la Argentina, como sucedió hace un siglo con los problemas del Río de la Plata.

En los años treinta, durante la guerra del Chaco, Argentina jugó un papel más relevante y el canciller argentino, Carlos Saavedra Lamas, obtuvo el premio novel de la paz por la solución de este conflicto. En Paraguay tradicionalmente ha existido cierta pugna por la influencia, hábilmente aprovechada por los paraguayos para obtener ventajas a dos puntas.

Sobre Bolivia, los gobiernos militares argentinos influyeron mucho en los golpes de 1971 y 1980, pero en cambio la influencia económica brasileña fue más importante. En algún momento se planteó un juego de alianzas de Argentina con Perú y Bolivia frente a Chile con Brasil y Ecuador, con Paraguay en postura oscilante. Estos eran juegos de guerra de los estados mayores, tomados de los sistemas de alianzas europeos.

Hoy, para la izquierda argentina, Chávez es la barrera contra EEUU y no Brasil, al cual ven con buenas relaciones con Washington. Predomina más bien la idea de que el gobierno de Lula asume un rol de contención sobre Chávez y Morales, de acuerdo a la estrategia de Washington y no en su contra.

En el nuevo escenario que abre la asunción de Obama, que en mi opinión reforzará la alianza con Brasilia, Argentina debe estar más cerca de ella que de Caracas -cuyo futuro político se ve ensombrecido por la caída del precio del petróleo- y retomar la idea central de triángulo ABC (Argentina, Brasil y Chile) como eje de la política regional, lo cual a su vez facilitará una mejor relación con Washington.

[Marino]

O Globo
OPINIÃO
Guerra no frio

Rússia e Ucrânia brigam pelo preço do gás que a primeira fornece à segunda, e a Europa congela. Simples assim? Não. A disputa sobre preços, volumes e contratos mal esconde a "diplomacia das torneiras" posta em prática pelo Kremlin sempre que algo lhe desagrada na relação com o Ocidente. E a Europa? Bem, a Europa compra da Rússia, em média, 25% do gás que consome, e 80% dele passam pelo território da Ucrânia.

Por isso, disputas entre Moscou e Kiev, como em 2006 e agora, são péssimo negócio para os europeus, cada vez mais temerosos de terem caído nas mãos de um fornecedor não confiável, a Rússia, e ardiloso - o Kremlin de Putin. Este não engole o governo pró-ocidental ucraniano de Viktor Yushchenko, que assumiu após a Revolução Laranja, de 2004, com apoio do Ocidente. Também não tolera o namoro entre a Otan e Kiev.

Sempre que surge a chance, o Kremlin apela para sua "diplomacia das torneiras", cuja mensagem implícita é: não se metam na minha área de influência. E o resultado mais imediato é a interrupção aos europeus do fornecimento de gás via Ucrânia, vital diante das baixas temperaturas do inverno no Hemisfério Norte. A Alemanha, maior compradora do gás russo, já está ameaçada de desabastecimento. O fornecimento à Itália caiu em 80%, à Áustria em 90%. Turquia, Grécia, Polônia, Hungria, Romênia, Croácia, Bulgária, Eslováquia e Moldávia também têm problemas. Em pior situação está a Bórnia-Herzegovina, que sofreu corte total no suprimento e estaria ameaçada de uma catástrofe humanitária.

Além das questões políticas, problemas de mercado estariam por trás do endurecimento da Rússia, cujo orçamento nacional depende em 60% das exportações de petróleo e gás. Os preços em queda após a crise econômica mundial ameaçam as metas de restauração do poder russo, principalmente em sua antiga área de influência. Isto teria obrigado Moscou a exigir aumento no preço do gás vendido à Ucrânia, que está abaixo do pago pelos europeus. A elevação do risco pode levar os clientes a optar por diversificar seus suprimentos. E tornar viável o gasoduto Nabucco, que substituiria parte do gás russo por turco. O Kremlin joga, os europeus congelam.

[Marino]

O Estado de São Paulo
Pansul-americanismo/artigo AE (Ref) Mário Cesar Flores
Mario Cesar Flores é almirante-de-esquadra (reformado)

Há cerca de 50 anos líderes redentoristas de países árabes, entre eles o protagônico presidente Nasser, do Egito, procuraram estruturar uma união alicerçada num ideário pan-arabista cuja motivação ideológica, inspirada no passado de relevância árabe, pretendia a superação da hegemonia ocidental. Seu passo mais audacioso foi a união política Egito-Síria, desfeita em curto prazo em razão das diferenças de interesses, perspectivas e objetivos dos dois países. Vivemos hoje uma paródia sul-americana do pan-arabismo, um pansul-americanismo estimulado por motivação similar à do antiocidentalismo árabe: o anti-império da retórica do presidente Chávez, clone ideológico de Nasser.

À semelhança do pan-arabismo antiocidental, de escassa compatibilidade com a plenitude democrática, também o pansul-americanismo anti-império está sendo mais bem aceito em países de regimes salvacionistas de tendência autoritária, travestidos de democracia por práticas em tese democráticas, viciadas por lideranças populistas messiânicas. O ideário pansul-americanista que Chávez associa ao seu socialismo bolivariano é adverso ao Primeiro Mundo, em particular aos EUA, na contramão do realismo sensato da frase do presidente da Guiana na reunião da Cúpula dos Países Latino-Americanos e do Caribe, Sauipe/2008, particularmente aplicável ao Brasil: “Somos parte do mundo...” Na sua habitual estigmatização do capitalismo, Chávez afirmou, naquela reunião, que “o socialismo nunca esteve tão vivo... morto está o capitalismo”. Essa afirmação, alheia à realidade da China, por exemplo, não faz sentido no nível internacional, em que os países se conduzem por interesses e objetivos por vezes incompatíveis com a utopia igualitária pressuposta no socialismo.

Tal como o pan-arabismo e seu antiocidentalismo, que tencionava reviver o passado de esplendor árabe, nosso pansul-americanismo e seu anti-império procura valorizar o indigenismo, haja vista sua receptividade em países sob forte influência política indígena - Bolívia e Equador -, embora as duas situações sejam radicalmente distintas: o arabismo foi relevante na história, na política, na ciência, na cultura e na religião, ao passo que mesmo o povo sul-americano de maior realce - os incas -, adiabático em seu território limitado, não deixou herança influente no mundo, como deixaram os árabes.

A implantação concreta do pansul-americanismo está sendo inibida por problemas divisionistas similares aos que prejudicaram o pan-arabismo: as percepções nacionais distintas quanto à nebulosa meta ideológica anti-império/antiglobalização, esta paradoxal no mundo inexoravelmente globalizado. E as diferenças nas concepções, nos objetivos e interesses do desenvolvimentismo: a mistura petrodolarizada de estatismo-assistencialismo do socialismo bolivariano na Venezuela, a combinação liberal-estatista-assistencialista no Brasil, o liberalismo no Chile, praticado por sua esquerda consciente da realidade, o populismo à Perón na Argentina, o cepalismo ainda atuante em alguns países, e por aí vai. Tudo isso contaminado por impulsos ideológicos unilaterais, como o refletido na rejeição categórica à Alca, proferida pelo presidente Chávez: se ela conviesse a outros países, como ficaria a união pansul-americana?

Nesse quadro de perspectivas, concepções, interesses e objetivos diferentes é natural que grassem divergências como são - para citar algumas em evidência - os tropeços conflituosos inibidores do avanço do Mercosul, que se estenderão ao Mercosul sul-americanizado, se ele vier a ocorrer, a pretensão paraguaia de revisão de Itaipu, a ameaça aos agricultores “brasiguaios”, o imbróglio do gás boliviano, atitudes hostis a empresas brasileiras e capital brasileiro (nacionalizações na Bolívia, conflitos com empreiteira brasileira no Equador, calotes) e as “papeleiras” do Uruguai (Argentina x Uruguai). Esse quadro de dissensos, ainda um tanto influenciado por anacrônicos resquícios históricos, é vulnerável à ocorrência de contenciosos de natureza política - como o recente episódio Colômbia-Equador/Farc - e até territorial, em recesso, mas não mortos. Insere-se aí a questão da influência relativa dos vários países na região e dela no mundo, o peso do Brasil, indigesto para alguns (hoje particularmente a Venezuela de Chávez, mas quantos países sul-americanos realmente apoiam o Brasil como membro permanente do Conselho de Segurança da ONU...? É mais fácil vê-los na Europa). Questão em que o Brasil procura praticar sua propensão natural de forma conciliatória, vez ou outra nuançada por discreto viés populista anti-EUA e a Venezuela procura fertilizar sua intenção com seus petrodólares - estratégia cuja revisão compulsada pela queda do preço do petróleo provavelmente usará a eleição de Obama e o fim da era do “satânico” Bush, para justificá-la...

Em suma: além da ameaça inerente aos ímpetos de regimes democráticos permeados por desvios populistas autoritários, o multilateralismo consensual implícito no pansul-americanismo é difícil também em razão do cenário de países que, à diferença da União Europeia, resistem soberana e ciosamente em seus interesses, perspectivas e objetivos distintos, se não até adversos. Essa dificuldade é evidenciada nos frágeis desempenhos e resultados das várias organizações e reuniões pretensamente unificadoras - a melancólica Aladi, o Mercosul, o Pacto Andino, o Grupo do Rio, a Unisul, a Cúpula dos Países Latinos e do Caribe, a Alternativa Bolivariana para as Américas, a Organização do Tratado de Cooperação Amazônica, agora o Conselho de Defesa e a projetada Organização dos Estados da América Latina e Caribe, negativista anti-EUA (quem sabe, no futuro, uma OEA também sem o Brasil: afinal, já fomos império, malvisto pelas repúblicas vizinhas...). Não é por falta de organizações e reuniões que a união avança lentamente, aos trancos e barrancos.

[ciclope]

Pergunta: O que seria das organizações unificatórias sulamericanas sem o Brasil?

[ademir]

O artigo abaixo foi publicado na Military Review do bimestre passado, se alguem tiver interesse em ler....

A única superpotência em declínio: A ascenção de um mundo multipolar
Shri Dilip Hiro

[bruno mt]

Ademir, este texto dá uma bela puxada de saco pro Chavez né? mas no final das contas acaba sendo bom.

[EDSON]

04/02/2009 - 11h45
Rússia diz que Brasil é seu grande parceiro na A.Latina

Madri, 4 fev (EFE).- O embaixador da Rússia na Espanha, Alexander Kuznetsov, afirmou hoje que a aproximação aos países da América Latina como Venezuela ou Cuba não deve ser motivo de preocupação, alegando que o Brasil é seu grande parceiro estratégico na região, "por sua vocação de ser uma potência global".

Ele lembrou que a Rússia e Brasil, junto a Índia e China, fazem parte do chamado Bric, que agrupa os países emergentes com maior potencial de crescimento no médio prazo.

"O resto, é preciso ver caso por caso", especificou.

Segundo ele, a nova política russa para a América Latina "não deve representar nenhum tipo de preocupação", especialmente , para os Estados Unidos.

Segundo o embaixador, esta estratégia não responde a "nenhum componente ideológico" relativo à época da Guerra Fria, mas a "elementos mais pragmáticos" no marco de um mundo cada vez mais multipolar.

Sobre Cuba, Kuznetsov disse que "a aliança ideológica da Guerra Fria já não existe", embora seu país não renuncie à relação "muito íntima que uniu ambos os povos durante aquele período histórico".

Insistiu em que a visita a Moscou do presidente cubano, Raúl Castro, surge de "elementos mais pragmáticos", especialmente econômicos.

Kuznetsov insistiu em que "o mesmo acontece com a Venezuela", embora tenha especificado que, neste caso, foi o presidente venezuelano, Hugo Chávez, que tomou a iniciativa nos acordos sobre armamento e energia.

[ciclope]

Tem caroço aí.

[Sterrius]

nem tanto ciclope.

Da AL é obvio que o principal alvo de vendas e acordos economicos é o Brasil, que como ele mesmo diz é membro do BRIC e querendo ou não uma das novas peças principais do jogo de xadrez mundial.

Logo o melhor pra russia é justamente fazer acordos com o Brasil para que nos G20 , G8 da vida ambos os paises falém a mesma lingua ganhando assim mais peso.

Agora obvio que o Brasil tb pensa a mesma coisa e no final é um tentando ganhar dinheiro em cima do outro . No final tudo se baseia em $, Influencia e negocios politicos.