GEOPOLÍTICA

[Marino]

Opinion: Hipótesis de conflicto – por Carlos Manuel Acuña
January 7, 2010

En este primer informe acumulamos una serie de hechos que muestran
para Latinoamérica -y el mundo- un escenario muy difícil a partir de
este año. La Argentina no podrá estar ajena a ese proceso, agravado
para nosotros por el voluntario estado de indefensión en que la ha
colocado el gobierno de Kirchner.


Por citar un ejemplo elegido casi al azar, digamos que al margen de la
opinión política que merezca, el influyente escritor Vargas Llosa que
reparte sus estadías entre Lima, Londres y Madrid, no ahorró palabras
de críticas para la familia reinante en la Argentina y que su hijo,
también escritor y analista, fue expulsado recientemente de Venezuela
por Chávez. Estos son datos menores de otra realidad que habla de la
carrera armamentista desatada en el continente, los vínculos chavistas
y de la izquierda con el régimen de Irán, la coordinación entre
Estados Unidos e Israel para frenar el crecimiento nuclear de ese país
y en lo que concierne a los latinoamericanos, digamos que la próxima
victoria de la derecha chilena preanuncia un cambio de escenario que
nos afectará directamente.


En el Perú, Alan García, tradicional aliado de la Argentina, no solo
hizo un viraje hacia la derecha, sino que también se arma para
enfrentar los próximos pasos estratégicos de la región. Los chilenos
necesitan petróleo barato para sus planes de desarrollo –inversos, por
cierto, a los lineamientos políticos de los Kirchner- que posiblemente
y a largo plazo podría ofrecerle Londres. Aquí, el futuro de YPF está
cuestionado por la corrupción que asegura que Néstor Carlos tiene
intereses en la empresa en tanto el desorden creciente pone su nota de
alarma por el crecimiento de la delincuencia y el desborde de ésta en
todos los terrenos, incluso el sindical junto con el aumento del
narcotráfico que coincidentemente retrocede en Colombia.
Simultáneamente, no podemos pasar por alto la inmensa capacidad de
nuestro País por ofrecer alimentos a un mundo cada vez más necesitado,
tema que ofrece la incongruencia oficial de limitar el desarrollo en
este campo que, además es uno de los más importantes en materia de
provisión de divisas.


Ya comenzado el nuevo año, la situación financiera interna amenaza con
explotar mientras arrima tensiones sociales que se profundizarán con
el correr de las semanas. A continuación brindamos un primer y somero
análisis del escenario que se enriquece con la destrucción de nuestros
aparatos de inteligencia, el desdén y desconocimiento de los políticos
argentinos por estos problemas permanentes y el extraordinario grado
de incultura de quienes ocupan los puestos de la dirigencia.


Todos los analistas dan por descontado el próximo triunfo electoral de
la derecha en Chile. Un gobierno con la presidencia de Sebastián
Piñera aplicará los principios y estrategias tradicionales de este
signo lo que incidirá guste o no guste, en el escenario estratégico
latinoamericano. También se extenderá hacia determinados sectores de
interés extracontinente y para expresarlo de manera simple y directa
diremos que las recientes maniobras militares realizadas por Gran
Bretaña en las Islas Malvinas están relacionadas con la circunstancia
que comentamos.


No se trata de que Londres tema una imposible acción argentina, sino
de algo más simple y específico como es la necesidad británica y por
extensión chilena a través de un acuerdo con su tradicional aliado, de
asegurarse la exploración. Explotación y consumo de las reservas
petrolíferas de esa zona. A esto deben agregarse otros minerales y la
consiguiente presión sobre nuestras costas e islas. La importancia del
asunto se expresa por su sola enunciación aunque podríamos añadir que
en el caso de Santiago, facilitará el aporte del combustible necesario
para desarrollar su industria encarecida por la importación del fluido
desde lejanas regiones. En el caso británico, es demasiado obvio el
interés que despierta el problema.


La respuesta argentina se ajusta a la incapacidad y desinformación del
gobierno kirchnerista: según versiones de excelente origen, si
resultara invitada -como lo serán los presidentes de la región y en
particular los vecinos- hoy por hoy Cristina Fernández de Kirchner
habría anticipado su decisión de no concurrir a la transmisión del
mando. De acuerdo con las fuentes consultadas, el matrimonio
gobernante priorizará lo ideológico como si esta cuestión fuera la
determinante de la nueva situación que se abre, aparte de querer
evitar el roce con representantes de regímenes opuestos a la declarada
orientación que se aplica en la Argentina. El infantilismo es otra de
las facetas que persiste en los actos de nuestro gobierno.


La carencia cultural e informática primará entonces y la falta de
visión se mantendrá incólume tal como sucedió durante los últimos
acontecimientos. De la misma manera que el kirchnerismo ignora el
revés electoral sufrido que lo ubica a esta altura de las
circunstancias con una imagen negativa superior al 90 por ciento, los
sucesos de Honduras pasaron desapercibidos en sus alcances y todo se
ajusta a la orientación de otro gobierno que también está en
bancarrota: el chavismo venezolano.


Honduras: un caso emblemático


Apenas apareció en la escena estratégica el caso hondureño, no fuimos
pocos los que lo calificamos de emblemático. En efecto, al evaluar sus
principales componentes, se llegó a la siguiente conclusión: 1) la
crisis política desatada por Zelaya estaba atada a una maniobra
importante de Hugo Chávez que buscaba extender su influencia política
en la zona y mantener abierto un corredor importante para el tráfico
de la droga. 2) el procedimiento para destituir a Zelaya estuvo
sustentado en firmes principios constitucionales que fueron tan
claros, que cuando la Policía lo echó del País, ya no era presidente.
El Congreso y la Corte Suprema Hondureña habían aplicado la ley y
resuelto la crisis acorde con las normas internas; 3) el posterior
refugio de Zelaya en la embajada del Brasil fue una maniobra
desesperada para revertir la situación y entre otras cosas, permitió
apreciar que la infiltración de izquierda en la OEA, las Naciones
Unidas, en la organizada tarea del periodismo y en el propio gobierno
brasileño, fueron insuficientes para revertir lo actuado, lo que
incluye los millones de dólares con que fueron tentados influyentes
militares hondureños, que denunciaron el caso; 4) el esfuerzo
ejecutado por la izquierda para mantener su posición hondureña
demostró la trascendencia de ese proceso que es el mismo que se
desarrolla entre las bambalinas o abiertamente en medio de la
desaprensión de los políticos. 5) La posterior derrota electoral de
Zelaya permitió cerrar el caso y demostrar el escaso respaldo popular
a la izquierda en general que desplegó toda su capacidad de
movilización en los restantes países donde espera instalarse con todo
su poder. Ese fue el momento en que se inició el retroceso de Hugo
Chávez.


Los brasileños frenaron al Foro de San Pablo


El reconocimiento internacional al resultado de las elecciones
hondureñas – una excepción es la Argentina – fue otro componente del
nuevo escenario abierto en Latinoamérica. Sólo nuestras ignorantes
autoridades no lo advirtieron y persisten en mantener el vínculo
dependiente de Caracas. La opinión de Evo Morales es imposible de
valorizar pues únicamente desempeña un papel secundario en la toma de
decisiones, pese a que su País se esfuerza por llevar adelante el
factor Indigenista, que es uno de los factores revolucionarios que
lleva adelante el extremismo mediante una modalidad que le permite
desempeñar un cierto rol estratégico en este juego del ajedrez
internacional donde la droga ha ingresado como un componente necesario
y peligroso.


El fracaso en Honduras llevó a los intereses que se mueven detrás de
la izquierda minoritaria, a intentar una compensación arriesgada
mediante una puntería levantada para alcanzar un objetivo de máxima:
revisar las alternativas de la Guerra Revolucionaria hace casi medio
siglo con la derrota de la subversión que en el Brasil adquirió
dimensiones prolongadas y espectaculares. Para ello, meses atrás
dentro del propio partido de Lula se habló de un proyecto revisor que
fue inmediatamente frenado por la dirigencia política, empresaria y
militar. Paradojalmente, en el País fundador del Foro de San Pablo y
posteriormente del Foro de Porto Alegre y otros similares en distintos
puntos del continente, la idea sucumbió pese a otra paradoja: Lula fue
uno de los fundadores de ese Foro.


El nuevo y último intento tuvo otro fracaso contundente. La revisión,
disfrazada como una Comisión Nacional de la Verdad que integraría el
III Programa Nacional de Derechos Humanos, generó una inmediata
reacción: el ministro de Defensa Nelson Jobim, los jefes del Ejército,
la Fuerza Aérea y la Armada, Enzo Peri, Juniti Saito y Julio Moura
Neto, respectivamente, amenazaron inmediatamente con sus renuncias y
de esa manera, casi en silencio, se puso en marcha una crisis de
proporciones que abarcó sin excepción a las dirigencias brasileñas, a
la prestigiosa Cancillería Itamaratí y todos, absolutamente todos,
tuvieron presente el caso Argentino donde esa revisión se transformó
en venganza y persecución, avanzó rápidamente a la disgregación de la
República, frenó su economía, desató el odio social que no existía y
colocó al País en un estado de indefensión único en toda su historia
con la creación de dos frentes: el interno y el externo.


Ni corto ni perezoso Lula entendió los argumentos, envió mensajes
tranquilizadores desde donde gozaba de unas cortas vacaciones en tanto
se supo que el ministro de Derechos Humanos, Paulo Vannuchi,
elaborador de la iniciativa, insistirá con su idea. De esta manera
queda latente una crisis potencial pese a la seria advertencia
formulada por el titular de la Comisión de Defensa del Parlamento,
Raúl Junggman, que merece repetirse en este artículo: “se perdió la
confianza de los militares…” Y no es para menos: el proyecto que
mencionamos excluía a los terroristas en la evaluación de delitos
cometidos durante la Guerra y está dirigido exclusivamente a los
militares y miembros de las Fuerzas de Seguridad. Por cierto, suprimía
la Amnistía que pacificó al País y lo colocó en el primer puesto de
liderazgo en América Latina, un lugar que antes ocupábamos los
argentinos.


Como puede apreciarse, la izquierda, cualquiera fueran sus matices,
mantiene una idéntica táctica y una misma estrategia repetida en todas
las geografías, con sus lugares comunes, identidad de argumentos
slogans calcados unos de otros y falsas acusaciones convenientemente
estudiadas desde el punto de vista psicológico y político. Hasta en
Chile y el Uruguay se lograron, aunque de manera limitada,
persecuciones revanchistas que superan lo simbólico. Lo que sucede
hizo que en Paraguay el amante Lugo ponga sus ímpetus en remojo, en
tanto las miradas giran en torno de un agonizante Chávez, una
Nicaragua intrascendente, una Colombia victoriosa que impulsa el
“derrame” de las FARC hacia el sur, una Bolivia a punto de romperse
bajo la atenta mirada de los Chilenos y Brasileños sobre ricos
territorios cuya población se siente rioplatense, en tanto una
tristeza decadente se abate sobre una Argentina inerme y desarmada.


Fuente: Informador Publico

[Marino]

Brazil Steers an Independent Course

Washington needs to rethink its assumptions on South America.


By SUSAN KAUFMAN PURCELL


Until recently, the Obama administration assumed that Brazil and the
United States were natural allies who shared many foreign policy
interests, particularly in Latin America. Brazil, after all, is a
friendly democracy with a growing market economy and Western cultural
values.


It will soon be the fifth largest economy in the world. It recently
discovered billions of barrels of petroleum in the deep waters off its
coast and is an agricultural powerhouse. It has also made significant
progress in eradicating poverty. It therefore seemed only natural to
expect that as Brazil became "more like us," it would seek to play a
more active and constructive role in this hemisphere, and that U.S.
and Brazilian political and security interests would largely
coincide.


This now seems like wishful thinking. On a number of important
political and security issues, Washington and Brasilia recently have
not seen eye to eye. Nor has Brazil shown much leadership in tackling
the important political and security challenges facing the region.


One example is Brazil's role in UNASUR (Union of South American
Nations). At a September meeting in Quito focused on regional security
issues, topics not discussed included the multibillion-dollar arms
race in the region, the granting of sanctuary and other forms of aid
by Venezuela to the Revolutionary Armed Forces of Colombia (FARC), a
Colombian narco-guerrilla group, and the growing nuclear cooperation
between Iran and Venezuela. Instead, Brazil joined UNASUR in
criticizing Colombia for having agreed to allow the U.S. to use seven
of its military bases for counterterrorist and counter narcotics
activities inside Colombia.


The fact that Colombia has been under attack by an armed guerrilla
group supported by some members of the Union was not considered
relevant to the organization's decision to criticize Colombia for
seeking help from Washington. Furthermore, none of the democratic
countries in South America, including Brazil, has offered military or
even rhetorical support to besieged Colombia.


Another example is Brazil's changing position concerning the
importance of democratic governance. Both Brazil and the U.S.
initially opposed the Honduran military's removal from office of the
democratically elected president, Manuel Zelaya, despite the fact that
Mr. Zelaya had violated Honduras's constitution.


Brazil's interest in democracy in Honduras does not, however, extend
to Cuba. Only weeks earlier, Brazil voted in the Organization of
American States to lift the membership ban on Cuba—a country that has
not held a democratic election in 50 years. This decision contradicted
the organization's democratic charter.


Brazil also has never tried to mobilize support against Venezuelan
President Hugo Chávez's use of democratic institutions to
systematically destroy that country's democracy. On the contrary,
Brazil's President Lula da Silva is supporting Venezuela's efforts to
join Mercosur (a South American customs union), despite rules that
limit membership to democratic countries.


Associated Press


Brazilian President Lula da Silva, right, and Iranian President
Mahmoud Ahmadinejad.


Finally, there is the issue of Brazil's apparent lack of concern
regarding Iran's increasing penetration into Latin America through
Venezuela. There are now weekly flights between Caracas and Tehran
that bring passengers and cargo into Venezuela without any customs or
immigration controls. Venezuela has also signed agreements with Iran
for transferring nuclear technology, and there is speculation it is
giving Iran access to Venezuelan uranium deposits.


Instead of expressing concern over Iran's activities in Latin America,
Brazil is drawing closer to Tehran and hopes to expand its $2 billion
bilateral trade to $10 billion in the near future. President Lula
recently hosted President Mahmoud Ahmadinejad in Brazil. He reiterated
his support for Iran's right to develop nuclear technology for
peaceful uses, while insisting that there is no evidence that Iran is
developing nuclear weapons.


Several conclusions can be drawn from Brazil's behavior. First, Brazil
wants to prevent the U.S. from expanding its military involvement in
South America, which Brazil regards as its sphere of influence.
Second, Brazil much prefers working within multilateral institutions,
rather than acting unilaterally.


Within these institutions, Brazil seeks to integrate all regional
players, achieve consensus and avoid conflict and fragmentation—all
worthy goals. But these are procedural, rather than substantive,
goals.


Stated differently, Brazil's multilateral efforts in the region seem
to value the appearance of leadership over finding real solutions to
the growing political and security threats facing Latin America. These
conclusions do not imply that the U.S. and Brazil have no overlapping
interests, or that they cannot work together to solve particular
regional or even global issues. They do mean Washington may need to
rethink its assumptions regarding the extent to which Brazil can be
relied on to deal with political and security problems in Latin
America in ways that are also compatible with U.S. interests.


Ms. Purcell is the director of the Center for Hemispheric Policy at
the University of Miami.

[Marino]

2010: perspectivas para as crises e conflitos nas relações internacionais

O ano de 2009 não apresentou grandes novidades ou esperanças maiores sobre o que poderá nos esperar em 2010, por mais que a eleição de Barack Obama o tenha sugerido. Em um ano, as crises mantiveram-se praticamente as mesmas e a tão esperada “nova abordagem” das relações internacionais na verdade não aconteceu. Deu-se, isso sim, a instauração de um clima mais aberto, mais voltado para o entendimento em alguns campos, em particular entre os grandes centros de poder. O artigo é de Francisco Carlos Teixeira da Silva.

Francisco Carlos Teixeira da Silva (*)

Os limites da novidade Obama
O clima de enfrentamento e de desconfiança, típico da Era Bush, foi suplantado pelo discurso mais aberto e disponível à negociação de Obama. Contudo, desde o fim da velha ordem mundial (a Guerra Fria, de 1945-1991), a possibilidade de um choque cataclísmico entre grandes potências é bastante baixa. A natureza dos novos conflitos – longe de uma nova ordem mundial pacífica e baseada em negociações internacionais conforme se esperava ao fim da Primeira Guerra do Iraque (1991) – é seu caráter assimétrico (o conflito entre fortes e fracos, no mais das vezes o fraco organizado em forma de Estado-rede em vez de Estado-Nação) ou mesmo dissimétrico (onde se enfrentam dois Estados-Nação, mas de capacidades altamente diferenciadas) [1].

Assim, 2009 reafirmou a nova natureza dos conflitos internacionais: nebulosos, desiguais, dispersos e com uso amplo de recursos táticos altamente sofisticados, em especial o recurso a uma ampla panóplia anti-mecanização (visando anular o poder tecnológico do adversário). Não podemos ainda esquecer, o retorno dos conflitos tipicamente convencionais, como foi a guerra entre a Rússia e a Geórgia em razão da Ossétia, conforme nos ensina Lucien Poirier (ver nota um). O fim do risco nuclear imediato – de Estado para Estado – abriu o caminho, claramente para o retorno das grandes operações militares de caráter clássico, sem as implicações decorrentes da possibilidade da “escalada nuclear”. Assim, o fim do “equilíbrio do terror”, a no balance condition, onde a possibilidade de golpear o adversário com força militar desequilibrada, buscando uma solução política para crises, é uma marca da nova ordem mundial, conforme o demonstram as guerras atuais (Iraque I e II, Líbano e Gaza, Geórgia).

O risco nuclear
O risco nuclear, por sua vez, foi empurrado para a borda do sistema dos Estados-Nação. Durante décadas o pensamento estratégico ocupou-se em “pensar o impensável”: como sobreviver, e se possível, vencer num conflito termonuclear total. Superada tal condição imediata, com a aceitação tácita e diplomática das grandes potências atômicas da negociação e do compromisso cooperante, o risco atômico tornou-se marginal. Trata-se, no momento, de controlar dois desenvolvimentos da possibilidade de uso do atômico (e do químico-biológico) enquanto armas: (i.) de um lado, a posse de tais armas pelo Estado-rede, que por suas características próprias não é suscetível a dissuasão; (ii.) De outro lado, impedir o acesso de Estados-párias (the rogue states) a tal possibilidade, limitando o clube dos possuidores de armas de destruição de massas a um número restrito de Estados convertidos à lógica da responsabilidade westfaliana.

Devemos, assim, pensar as condições de conflito e crise da Nova Ordem Mundial a partir das premissas teóricas acima expostas, abrindo caminho para a análise dos mais importantes dossiês críticos atuais e cujo desenrolar será a base das relações internacionais em 2010.

A Herança Bush
Desta forma, no tocante às grandes crises, mantiveram-se os termos herdados da Administração Bush. A melhoria das relações deu-se principalmente no relacionamento dos Estados Unidos com os demais centros de poder do planeta. Assim, a chegada de Obama ao poder resultou, sem qualquer dúvida, numa ampla melhoria do relacionamento com a Europa, encerrando o velho e inútil debate provocado por Donald Rumsfeld (então secretário de Defesa do Bush) sobre a “velha” e a “nova” Europa. Em especial a França, agora com Nicolás Sarkozy, e a Espanha, voltam a alinhar-se com a política externa americana, em detrimento das relações com a Polônia, Itália e outros aliados neoconservadores de Washington. Assim, a “fratura atlântica”, no interior da própria OTAN foi fechada, sem grandes esforços com a mudança de comando em Washington.

Em segundo lugar, o relacionamento com a Federação Russa que havia chegado ao ponto mais baixo nas conferências de segurança de Munique e na cúpula da OTAN em Bucareste, em 2008 (quando se discutiu a proposta americana de incorporação a Ucrânia e da Geórgia) também sofreu uma notável melhoria com as novas posturas da Administração Obama [2]. Na conferência de Munique, o premiê russo Vladimir Putin fez uma fala curta e dura, advertindo os EUA e o Ocidente em geral contra a tentativa de isolamento da Rússia, em especial em virtude do projeto da Administração Bush de construir um escudo antimíssil em antigos países do pacto de Varsóvia, literalmente às portas das regiões estratégicas da Federação Russa.

Na verdade, já antes de março de 2009, em tratativas secretas, a Administração Obama ofereceu a Moscou o desmantelamento do programa do escudo antimíssil na Europa em troca de um alinhamento – que acabará se convertendo em realidade ao longo de 2009 – dos russos sobre o dossiê iraniano. Assim, Obama conseguiu uma vitória diplomática significativa, isolando ainda mais os iranianos, poupando gastos astronômicos com armas (no momento em que o déficit torna-se um peso alarmante em plena crise econômica mundial). Tais acordos abririam o caminho para, mais tarde – na conferência de cúpula de Moscou, em julho de 2009 -, iniciarem-se conversações entre Washington e Moscou visando à redução dos arsenais nucleares de ambos os países, invertendo a tendência dominante dos oito anos da Administração Bush.

Por fim, e de forma significativa, a primeira missão externa da nova secretária de Estado, Hillary Clinton, foi em direção a Ásia Oriental, visitando a China, Coréia do Sul e Japão. O relance de uma parceria Washington-Beijing, um ponto forte da Administração Clinton, voltou para a agenda principal norte-americana. Os temas econômicos, a questão da subvalorização do Yuan – e seu impacto sobre as contas externas americanas – e o dossiê da Coréia do Norte foram pontos centrais da atenção norte-americana.

América Latina: mais uma vez esquecida!
Entretanto, outros campos do relacionamento internacional não tiveram a mesma dinâmica da qual foram objeto europeus, russos e chineses. Após um começo promissor de Obama na 39ª Conferência da Organização dos Estados Americanos, OEA, em San Pedro de Sula (Honduras), a America Latina foi, ainda uma vez, abandonada ao mesmo ritmo tradicional dos formuladores norte-americanos. Talvez pior. O estamento militar, e a diplomacia herdade de Bush, ao lado do lobby neoconservador no Congresso Americano, conseguiram igualar a política de Bush e Obama para o hemisfério Ocidental. Desde uma abordagem inócua para as terríveis questões econômicas e de segurança em curso no México, até o fiasco do anuncio do acordo militar com a Colômbia (o qual as chancelarias do continente souberam pelos jornais) culminante na postura ambígua sobre o golpe militar em Honduras. O aparente esvaziamento dos argumentos de Hugo Chávez não se deu, e mesmo conseguiu ganhar novo conteúdo – após todos vaticinarem que Chávez ficaria, perante Obama, sem discurso – quando o presidente dos Estados Unidos aceita gerir sete bases militares no território colombiano.

A sensação de frustração rapidamente espalhou-se pelo hemisfério, variando desde um martelamento contínuo como as críticas venezuelanas contra o acordo militar Washington-Bogotá até o sentimento de frustração claramente manifestado por Brasília.

O desconforto de Washington
Alguns especialistas em política externa, ligados ao Partido Democrata norte-americano, sentiram-se tão desconfortáveis perante a ausência de proposições claras e alternativas, que tiveram que sair à cena para defender a política externa da Administração Obama. Talvez a mais significativa intervenção – pelo veículo utilizado e pelo prestígio do autor – tenha sido o artigo de Zbigniew Brzezinski no número de janeiro/fevreiro de 2010 da Foreign Affairs. Desde o significativo título do artigo – Let Obama Be Obama (sic!) – até a verdadeira “arrumada” que o velho especialista dá aos assuntos externos norteamericanos, o artigo assemelha-se a uma chamada à ordem para o departamento de Estado e de Defesa, com sérias advertências encobertas sob o manto da compreensão e da benévola expectativa.

De qualquer forma, malgrado os novos termos apresentados para a diplomacia americana, em especial no discurso de Obama na cidade do Cairo, pouca coisa transformou-se em realidade. O estruturado discurso perante a elite egípcia, responde os termos das relações dos Estados Unidos, e em conseqüência do Ocidente, com o Islã, e constitui-se numa peça de elevado valor epistemológico em relações internacionais. Mas, não resultou em mudanças significativas sobre o apoio norte-americano aos regimes reacionários do Oriente Médio, a mediação no conflito entre Israel-Palestina ou na permanente vontade de intervir por meio de ações militares bruscas, como ocorreu ao longo de 2009 no Paquistão e no Yemen. Neste último país, em virtude dos seguidos erros da Administração Bush, a Al-Qaeda pode se implantar fortemente ao longo de 2009.

No grande mapa das relações internacionais, por sua vez, a anunciada “nova abordagem” proposta pela Administração Obama, também não aconteceu.

Notas

[1] É de extrema relevância, no atual momento dos conflitos da era pós-nuclear, um retorno ao classicismo nos estudos sobre as guerras e, fundamentalmente, na reconstrução da inteireza epistemológica das doutrinas bélicas. O interregno de 1945 ( ou 1947 ou 1949 ) até 1991 provocado pela Guerra Fria e a condição MAD ( de mútua destruição assegurada ) foi suplantado. Da mesma forma a chamada “Inversão clauzewitzniana” também o foi. Isso quer dizer que (i) o risco de escalada nuclear dos conflitos é bastante baixa, o que libera as forças convencionais para um amplo uso, marcando o retorno da guerra convencional ou clássica como forma central de conflito entre os Estados-Nação; (ii) A aparição de formas avançadas, tecnologicamente sofisticadas, de guerra irregular, sob a forma de conflitos assimétricos, contrapondo o Estado-Nação a formas novas de Estado-rede, tais como o terrorismo, o narcotráfico, o crime transfronteiriço, etc... Um texto revelador sobre o tema – e que foi durtante muito tempo ignorado em função da fixação tecnicista da estratégia pós-Guerra Fria, é a análise magistral do general francês Lucien Poirier da Primeira Guerra do Golfo ( ou do Iraque, em 1991), quando afirma: ...a Guerra do Golfo restaurou a violência nas suas funções anteriores e marca uma transformação de peso na sua trajetória histórica. ‘’ Ver POIRIER, Lucien. La Guerre du Golfe dans La genealogie de La stratégie. In: Revue Stratégique, no. 51, 3º. e 4º. Trimestre, 1991.

[2] Na Conferência de Bucareste, organizada pela NATO, malgrado a pressão da Polônia e dos Países Bálticos, ferrenhamente anti-russos, a posição da França e a Itália – contrárias a incorporação da Gerorgia e da Ucrânia – acabou sendo vencedora. Com a incorpração das duas antigas ex-repúblicas soviéticas a OTAN teria desencadeado uma reação nacionalista extremamente agressiva em Moscou. Ver a análise da agenda da conferência em: http://www.nato.int/docu/update/2008/04 ... 0402b.html; e ainda: http://www.summitbucharest.ro/en/1.html

(*) Coordenador do Laboratório de Estudos do Tempo Presente/TEMPO/Universidade do Brasil/UFRJ.

[Marino]

2010: perspectivas para as crises e conflitos nas relações internacionais

O ano de 2009 não apresentou grandes novidades ou esperanças maiores sobre o que poderá nos esperar em 2010, por mais que a eleição de Barack Obama o tenha sugerido. Em um ano, as crises mantiveram-se praticamente as mesmas e a tão esperada “nova abordagem” das relações internacionais na verdade não aconteceu. Deu-se, isso sim, a instauração de um clima mais aberto, mais voltado para o entendimento em alguns campos, em particular entre os grandes centros de poder. O artigo é de Francisco Carlos Teixeira da Silva.

Francisco Carlos Teixeira da Silva (*)

Os limites da novidade Obama
O clima de enfrentamento e de desconfiança, típico da Era Bush, foi suplantado pelo discurso mais aberto e disponível à negociação de Obama. Contudo, desde o fim da velha ordem mundial (a Guerra Fria, de 1945-1991), a possibilidade de um choque cataclísmico entre grandes potências é bastante baixa. A natureza dos novos conflitos – longe de uma nova ordem mundial pacífica e baseada em negociações internacionais conforme se esperava ao fim da Primeira Guerra do Iraque (1991) – é seu caráter assimétrico (o conflito entre fortes e fracos, no mais das vezes o fraco organizado em forma de Estado-rede em vez de Estado-Nação) ou mesmo dissimétrico (onde se enfrentam dois Estados-Nação, mas de capacidades altamente diferenciadas) [1].

Assim, 2009 reafirmou a nova natureza dos conflitos internacionais: nebulosos, desiguais, dispersos e com uso amplo de recursos táticos altamente sofisticados, em especial o recurso a uma ampla panóplia anti-mecanização (visando anular o poder tecnológico do adversário). Não podemos ainda esquecer, o retorno dos conflitos tipicamente convencionais, como foi a guerra entre a Rússia e a Geórgia em razão da Ossétia, conforme nos ensina Lucien Poirier (ver nota um). O fim do risco nuclear imediato – de Estado para Estado – abriu o caminho, claramente para o retorno das grandes operações militares de caráter clássico, sem as implicações decorrentes da possibilidade da “escalada nuclear”. Assim, o fim do “equilíbrio do terror”, a no balance condition, onde a possibilidade de golpear o adversário com força militar desequilibrada, buscando uma solução política para crises, é uma marca da nova ordem mundial, conforme o demonstram as guerras atuais (Iraque I e II, Líbano e Gaza, Geórgia).

O risco nuclear
O risco nuclear, por sua vez, foi empurrado para a borda do sistema dos Estados-Nação. Durante décadas o pensamento estratégico ocupou-se em “pensar o impensável”: como sobreviver, e se possível, vencer num conflito termonuclear total. Superada tal condição imediata, com a aceitação tácita e diplomática das grandes potências atômicas da negociação e do compromisso cooperante, o risco atômico tornou-se marginal. Trata-se, no momento, de controlar dois desenvolvimentos da possibilidade de uso do atômico (e do químico-biológico) enquanto armas: (i.) de um lado, a posse de tais armas pelo Estado-rede, que por suas características próprias não é suscetível a dissuasão; (ii.) De outro lado, impedir o acesso de Estados-párias (the rogue states) a tal possibilidade, limitando o clube dos possuidores de armas de destruição de massas a um número restrito de Estados convertidos à lógica da responsabilidade westfaliana.

Devemos, assim, pensar as condições de conflito e crise da Nova Ordem Mundial a partir das premissas teóricas acima expostas, abrindo caminho para a análise dos mais importantes dossiês críticos atuais e cujo desenrolar será a base das relações internacionais em 2010.

A Herança Bush
Desta forma, no tocante às grandes crises, mantiveram-se os termos herdados da Administração Bush. A melhoria das relações deu-se principalmente no relacionamento dos Estados Unidos com os demais centros de poder do planeta. Assim, a chegada de Obama ao poder resultou, sem qualquer dúvida, numa ampla melhoria do relacionamento com a Europa, encerrando o velho e inútil debate provocado por Donald Rumsfeld (então secretário de Defesa do Bush) sobre a “velha” e a “nova” Europa. Em especial a França, agora com Nicolás Sarkozy, e a Espanha, voltam a alinhar-se com a política externa americana, em detrimento das relações com a Polônia, Itália e outros aliados neoconservadores de Washington. Assim, a “fratura atlântica”, no interior da própria OTAN foi fechada, sem grandes esforços com a mudança de comando em Washington.

Em segundo lugar, o relacionamento com a Federação Russa que havia chegado ao ponto mais baixo nas conferências de segurança de Munique e na cúpula da OTAN em Bucareste, em 2008 (quando se discutiu a proposta americana de incorporação a Ucrânia e da Geórgia) também sofreu uma notável melhoria com as novas posturas da Administração Obama [2]. Na conferência de Munique, o premiê russo Vladimir Putin fez uma fala curta e dura, advertindo os EUA e o Ocidente em geral contra a tentativa de isolamento da Rússia, em especial em virtude do projeto da Administração Bush de construir um escudo antimíssil em antigos países do pacto de Varsóvia, literalmente às portas das regiões estratégicas da Federação Russa.

Na verdade, já antes de março de 2009, em tratativas secretas, a Administração Obama ofereceu a Moscou o desmantelamento do programa do escudo antimíssil na Europa em troca de um alinhamento – que acabará se convertendo em realidade ao longo de 2009 – dos russos sobre o dossiê iraniano. Assim, Obama conseguiu uma vitória diplomática significativa, isolando ainda mais os iranianos, poupando gastos astronômicos com armas (no momento em que o déficit torna-se um peso alarmante em plena crise econômica mundial). Tais acordos abririam o caminho para, mais tarde – na conferência de cúpula de Moscou, em julho de 2009 -, iniciarem-se conversações entre Washington e Moscou visando à redução dos arsenais nucleares de ambos os países, invertendo a tendência dominante dos oito anos da Administração Bush.

Por fim, e de forma significativa, a primeira missão externa da nova secretária de Estado, Hillary Clinton, foi em direção a Ásia Oriental, visitando a China, Coréia do Sul e Japão. O relance de uma parceria Washington-Beijing, um ponto forte da Administração Clinton, voltou para a agenda principal norte-americana. Os temas econômicos, a questão da subvalorização do Yuan – e seu impacto sobre as contas externas americanas – e o dossiê da Coréia do Norte foram pontos centrais da atenção norte-americana.

América Latina: mais uma vez esquecida!
Entretanto, outros campos do relacionamento internacional não tiveram a mesma dinâmica da qual foram objeto europeus, russos e chineses. Após um começo promissor de Obama na 39ª Conferência da Organização dos Estados Americanos, OEA, em San Pedro de Sula (Honduras), a America Latina foi, ainda uma vez, abandonada ao mesmo ritmo tradicional dos formuladores norte-americanos. Talvez pior. O estamento militar, e a diplomacia herdade de Bush, ao lado do lobby neoconservador no Congresso Americano, conseguiram igualar a política de Bush e Obama para o hemisfério Ocidental. Desde uma abordagem inócua para as terríveis questões econômicas e de segurança em curso no México, até o fiasco do anuncio do acordo militar com a Colômbia (o qual as chancelarias do continente souberam pelos jornais) culminante na postura ambígua sobre o golpe militar em Honduras. O aparente esvaziamento dos argumentos de Hugo Chávez não se deu, e mesmo conseguiu ganhar novo conteúdo – após todos vaticinarem que Chávez ficaria, perante Obama, sem discurso – quando o presidente dos Estados Unidos aceita gerir sete bases militares no território colombiano.

A sensação de frustração rapidamente espalhou-se pelo hemisfério, variando desde um martelamento contínuo como as críticas venezuelanas contra o acordo militar Washington-Bogotá até o sentimento de frustração claramente manifestado por Brasília.

O desconforto de Washington
Alguns especialistas em política externa, ligados ao Partido Democrata norte-americano, sentiram-se tão desconfortáveis perante a ausência de proposições claras e alternativas, que tiveram que sair à cena para defender a política externa da Administração Obama. Talvez a mais significativa intervenção – pelo veículo utilizado e pelo prestígio do autor – tenha sido o artigo de Zbigniew Brzezinski no número de janeiro/fevreiro de 2010 da Foreign Affairs. Desde o significativo título do artigo – Let Obama Be Obama (sic!) – até a verdadeira “arrumada” que o velho especialista dá aos assuntos externos norteamericanos, o artigo assemelha-se a uma chamada à ordem para o departamento de Estado e de Defesa, com sérias advertências encobertas sob o manto da compreensão e da benévola expectativa.

De qualquer forma, malgrado os novos termos apresentados para a diplomacia americana, em especial no discurso de Obama na cidade do Cairo, pouca coisa transformou-se em realidade. O estruturado discurso perante a elite egípcia, responde os termos das relações dos Estados Unidos, e em conseqüência do Ocidente, com o Islã, e constitui-se numa peça de elevado valor epistemológico em relações internacionais. Mas, não resultou em mudanças significativas sobre o apoio norte-americano aos regimes reacionários do Oriente Médio, a mediação no conflito entre Israel-Palestina ou na permanente vontade de intervir por meio de ações militares bruscas, como ocorreu ao longo de 2009 no Paquistão e no Yemen. Neste último país, em virtude dos seguidos erros da Administração Bush, a Al-Qaeda pode se implantar fortemente ao longo de 2009.

No grande mapa das relações internacionais, por sua vez, a anunciada “nova abordagem” proposta pela Administração Obama, também não aconteceu.

Notas

[1] É de extrema relevância, no atual momento dos conflitos da era pós-nuclear, um retorno ao classicismo nos estudos sobre as guerras e, fundamentalmente, na reconstrução da inteireza epistemológica das doutrinas bélicas. O interregno de 1945 ( ou 1947 ou 1949 ) até 1991 provocado pela Guerra Fria e a condição MAD ( de mútua destruição assegurada ) foi suplantado. Da mesma forma a chamada “Inversão clauzewitzniana” também o foi. Isso quer dizer que (i) o risco de escalada nuclear dos conflitos é bastante baixa, o que libera as forças convencionais para um amplo uso, marcando o retorno da guerra convencional ou clássica como forma central de conflito entre os Estados-Nação; (ii) A aparição de formas avançadas, tecnologicamente sofisticadas, de guerra irregular, sob a forma de conflitos assimétricos, contrapondo o Estado-Nação a formas novas de Estado-rede, tais como o terrorismo, o narcotráfico, o crime transfronteiriço, etc... Um texto revelador sobre o tema – e que foi durtante muito tempo ignorado em função da fixação tecnicista da estratégia pós-Guerra Fria, é a análise magistral do general francês Lucien Poirier da Primeira Guerra do Golfo ( ou do Iraque, em 1991), quando afirma: ...a Guerra do Golfo restaurou a violência nas suas funções anteriores e marca uma transformação de peso na sua trajetória histórica. ‘’ Ver POIRIER, Lucien. La Guerre du Golfe dans La genealogie de La stratégie. In: Revue Stratégique, no. 51, 3º. e 4º. Trimestre, 1991.

[2] Na Conferência de Bucareste, organizada pela NATO, malgrado a pressão da Polônia e dos Países Bálticos, ferrenhamente anti-russos, a posição da França e a Itália – contrárias a incorporação da Gerorgia e da Ucrânia – acabou sendo vencedora. Com a incorpração das duas antigas ex-repúblicas soviéticas a OTAN teria desencadeado uma reação nacionalista extremamente agressiva em Moscou. Ver a análise da agenda da conferência em: http://www.nato.int/docu/update/2008/04 ... 0402b.html; e ainda: http://www.summitbucharest.ro/en/1.html

(*) Coordenador do Laboratório de Estudos do Tempo Presente/TEMPO/Universidade do Brasil/UFRJ.

Depois de postar vi que o artigo é muito mais amplo, e o acima é um extrato publicado na Agência Carta Maior, que vi no Noticiário Naval.
Ver o completo aqui, vale a pena:
http://www.tempopresente.org/index.php? ... Itemid=147

[Francoorp]

This now seems like wishful thinking. On a number of important
political and security issues, Washington and Brasilia recently have
not seen eye to eye. Nor has Brazil shown much leadership in tackling
the important political and security challenges facing the region.

Quem tem desafios Políticos e de segurança na região não é o Brasil, temos os nossos interesses, e estes não coincidem com os deles. Pra mim este é o inicio de um problema que o nosso país terá que enfrentar em breve, pois, sempre que o petróleo seja "nosso"!!!

Furthermore, none of the democratic
countries in South America, including Brazil, has offered military or
even rhetorical support to besieged Colombia.

Temos na constituição a Não intervenção!!!

Brazil voted in the Organization of
American States to lift the membership ban on Cuba—a country that has
not held a democratic election in 50 years. This decision contradicted
the organization's democratic charter.

Quem tem interesse em colonizar Cuba não é o Brasil, este país é um país latino, então é amigo do Brasil.

Brazil also has never tried to mobilize support against Venezuelan
President Hugo Chávez's use of democratic institutions to
systematically destroy that country's democracy. On the contrary,
Brazil's President Lula da Silva is supporting Venezuela's efforts to
join Mercosur (a South American customs union), despite rules that
limit membership to democratic countries.

E por que deveríamos, no fim quem perdeu com a entrada do Hugo Chaves na Venezuela foi os States of America, pois agora deve pagar o preço de mercado do petroleo, sem descontos como antes.

There are now weekly flights between Caracas and Tehran
that bring passengers and cargo into Venezuela without any customs or
immigration controls. Venezuela has also signed agreements with Iran
for transferring nuclear technology, and there is speculation it is
giving Iran access to Venezuelan uranium deposits.

Estão somente procurando um "caso" como pretexto, o Chávez tem razão, a campanha mediatrica esta aumentando a aposta, o risco é real.

Instead of expressing concern over Iran's activities in Latin America,
Brazil is drawing closer to Tehran and hopes to expand its $2 billion
bilateral trade to $10 billion in the near future.

Certo, parece que eles estão muito mais avançados do que nós no desenvolvimento nuclear, seja pacifico que militar, então, temos que tentar meter a mão em algo de bom pra nós, pois do futuro ninguém sabe, pode ser que a bomba seja indispensável!

Several conclusions can be drawn from Brazil's behavior. First, Brazil
wants to prevent the U.S. from expanding its military involvement in
South America, which Brazil regards as its sphere of influence.

Viu isso so agora???

Second, Brazil much prefers working within multilateral institutions,
rather than acting unilaterally.

Porque sozinho, não temos nenhuma força...por enquanto!!

Within these institutions, Brazil seeks to integrate all regional
players, achieve consensus and avoid conflict and fragmentation—all
worthy goals. But these are procedural, rather than substantive,
goals.

Ou seja: Tem que ser como queres, ou não é uma coisa objetiva, real e verdadeira!!

These
conclusions do not imply that the U.S. and Brazil have no overlapping
interests, or that they cannot work together to solve particular
regional or even global issues.

Não se iluda, tem que comprar e não tomar os recursos minerais na força, tens que pagar o preço de mercado!!

They do mean Washington may need to
rethink its assumptions regarding the extent to which Brazil can be
relied on to deal with political and security problems in Latin
America in ways that are also compatible with U.S. interests.

Certamente, se a posição de Washington for diferente da nossa, temos sim que defender nossos interesses.

[Rock n Roll]

Há que defender nossos interesses e marcar posições na diplomacia, na presença de fato na região amazônica, e nos meios de disuasão. Razão deste tópico.
Bom lembrar que foi um produto da ind. de defesa brasileira , o ST; Que deu a porrada mais certeira até agora nas FARC. No episódio dos ST na fronteira, ou dentro, com (do) Equador.
Até hoje o fato mais marcante neste episódio é o silêncio dos EUA e Colômbia sobre os laptops recuperados na base de Reyes. É um ganho de dados que pode ser desconfortável para muuuita gente. Basta dar uma olhada no aspecto geopolítico associado aos meios de disuasão, conjugados num mesmo post.
Muito bom pra traduzir um efeito imediato do objeto do topic.

[Marino]

Brasil quer criar conselho na América do Sul para resolver crises políticas

Sergio Leo, de Brasília

Os desdobramentos internacionais e regionais das crises políticas na região sul-americana devem levar o Brasil a propor aos países vizinhos a criação de um novo conselho regional, o Conselho de Paz e Segurança da América do Sul, informou ao Valor o ministro de Relações Exteriores, Celso Amorim.

"Temos esse esforço todo de criação de confiança, com o Conselho de Defesa da Unasul, temos o Conselho de Defesa e o Conselho de Combate ao Narcotráfico, devemos trabalhar intensamente na questão de paz e segurança na região", comentou Amorim, ao revelar que cogita a criação do novo conselho, para tratar dos desdobramentos políticos relacionados aos problemas de segurança dos países da Unasul. "Na região, há ideias parecidas", comentou.

Amorim não deu detalhes do projeto, que será discutido com os governos sul-americanos, mas indica que as discussões no novo conselho cuidariam dos atritos provocados entre países andinos devido à atuação das guerrilhas colombianas, divergências como os bloqueios de fronteira entre Argentina e Uruguai ou ameaças à integridade dos países.

"Tudo tem seu lado político, os países, na prática fizeram isso (as tarefas de um futuro conselho) na crise da Bolívia e em outras situações", menciona Amorim, fazendo referência à ameaça de separatismo ocorrida, no ano passado, na Bolívia, após uma crise política provocada pela disputa em torno da nova constituição do país. Os atuais conselhos da Unasul seriam "mais técnicos", com alcance limitado para discussão intergovernamental das ameaças à paz e à segurança, argumenta.

Amorim acredita que, apesar dos atritos políticos entre os países da região, o Conselho de Defesa da Unasul tem servido para aproximar os governos. Ele dá como exemplo a decisão da Colômbia de formalizar, em documento ao Conselho, os compromissos assumidos contra o uso de suas bases militares para ações fora de suas fronteiras. Segundo notou o ministro, o compromisso mencionou, de maneira inédita, que o governo colombiano assumia formalmente as declarações das autoridades da Colômbia feitas à imprensa sobre o tema. "Não resolve todos os problemas, há questões psicológicas, mas já se avançou muito", diz, otimista.

Do ponto de vista econômico, uma das prioridades do governo neste ano, segundo Amorim, é fazer um diagnóstico completo das razões para a queda nas exportações brasileiras para os países do continente. Em 2009, as exportações brasileiras para a América Latina e Caribe caíram 32% e foram verificadas quedas de 30% nas vendas ao Mercosul e de 33,7% aos demais países da região.

"A América do Sul sempre será prioridade sob esse aspecto, temos de pensar mais profundamente como estar mais presente", comentou o ministro, que quer ver análises detalhadas sobre o efeito da crise econômica e da maior competitividade chinesa sobre o desempenho das vendas de empresas brasileiras à região. Amorim acredita que o país também não pode descuidar das iniciativas voltadas à África, onde empresas brasileiras têm encontrado boas oportunidades, e ele vê grande espaço para a cooperação, inclusive com terceiros países como Estados Unidos e as nações europeias.

O governo pretende mudar a política em relação à China, que, no ano passado, passou a ser o principal mercado para os produtos brasileiros e o segundo maior fornecedor do Brasil, só atrás dos EUA. "A China tem de aprofundar o sentido de nossa parceira estratégica", diz Amorim. "O Brasil não pode ter uma parceria em que praticamente só vende commodities e compra manufaturas", diz ele, que não prevê atritos com os chineses.

"Eles entendem isso, temos de fazer grande esforço para grandes investimentos de conteúdo tecnológico no Brasil", argumenta. O Brasil tenta marcar com os chineses uma reunião da Cosban, a comissão de alto nível entre os dois governos, para discutir esse tema. A intenção dos brasileiros é realizar a reunião em abril, talvez coincidindo com outro encontro, o dos Brics - Brasil, Rússia, Índia e China. O encontro dos Brics, a ser realizado no Brasil, provavelmente em Brasília, depende ainda de confirmação dos outros países.

[Marino]

Valor:
CRISTIANO ROMERO
Os EUA e a emergência do Brasil
Centro de estudos sobre assuntos internacionais mais influente dos Estados Unidos, o "Council
on Foreign Relations (CFR)" decidiu criar uma força-tarefa para estudar o Brasil. O grupo começa a
trabalhar em março e terá duração de nove meses. O objetivo é produzir um relatório com
recomendações, ao governo Obama, sobre como lidar com o Brasil, em particular com o Brasil que está
emergindo no cenário mundial. O contexto é a sucessão presidencial brasileira. Por isso, o CFR planeja
entregar o documento à Casa Branca no fim do ano, às vésperas da mudança de governo por aqui.
Não é a primeira vez que o conselho chama a atenção de autoridades americanas para o Brasil.
Em 2001, uma outra força-tarefa apresentou relatório ao então presidente George W. Bush, recémempossado,
mostrando a importância do país e sugerindo que o governo americano o tratasse como
uma prioridade da política externa. Bush ignorou o documento. Em 2008, num documento mais amplo,
que tratava de toda a América Latina (AL), o CFR propôs a Obama que aprofundasse as relações dos
EUA com o México e o Brasil.
Os dois documentos diziam que era preciso prestar mais atenção no Brasil por se tratar de um
ator relevante para questões regionais e internacionais de interesse dos americanos. Possivelmente, o
próximo relatório não perderá tempo falando da relevância do país. "Não é mais necessário justificar a
importância do Brasil. Entretanto, não há atenção nem conhecimento sobre o país, então, o que deve
prevalecer é a ideia de que "não podemos errar novamente ao não interpretar o Brasil; precisamos gerar
capacidade em Washington de interpretar o que os brasileiros estão fazendo"", diz o professor Matias
Spektor, coordenador do Centro de Estudos sobre Relações Internacionais da FGV e estudioso das
relações Brasil-EUA - no ano passado, ele publicou o livro "Kissinger e o Brasil" (Zahar), resultado de
uma pesquisa monumental.
Em dezembro, a FGV e o CFR promoveram, no Rio, seminário sobre o "rising Brazil" (Brasil
emergente) e suas implicações para a ordem mundial e as instituições internacionais. A realização do
evento já foi uma prova de que o país voltou a figurar no radar dos americanos. Coincidentemente, as
discussões ocorreram em meio à crise de Honduras e às repercussões da visita do presidente do Irã,
Mahmoud Ahmadinejad, a Brasília. "Foi uma sorte histórica o seminário ter acontecido nesse contexto.
Aqui, são duas instâncias em que o governo americano não consegue entender qual é a lógica que
governa o processo decisório brasileiro. Para eles, não é óbvio o que a gente faz", observa Spektor.
A pouca compreensão está refletida na diatribe de Susan Purcell, diretora do Centro de Política
Hemisférica da Universidade de Miami. Na semana passada, ela publicou artigo sobre o "curso
independente" adotado pelo Brasil. No texto, confirma a percepção de que o país é visto hoje como um
ator mais relevante no cenário global. Ao mesmo tempo, lança dúvidas sobre sua confiabilidade como
parceiro dos EUA.
O tema é quente. No seminário FGV-CFR, prevaleceram três conjuntos de argumentos. O
primeiro diz respeito ao papel do Brasil na América do Sul e, no limite, na AL. Há muito tempo existe nos
EUA a expectativa de que o Brasil se comporte como uma potência regional. Por isso, aplaudiu-se a
criação do Conselho Sul-Americano de Defesa. Os americanos não entendem, no entanto, por que o
país não tem uma política assertiva em relação às Forças Armadas Revolucionárias da Colômbia (Farc).
"O seminário avançou bastante ao mostrar aos americanos qual é a lógica de o Brasil não adotar uma
política de potência regional tradicional. Essa expectativa vem de longe e continua presente. Kissinger,
nos anos 70, avisou aos brasileiros que, "à medida que vocês ficarem mais fortes, vão sentir aquilo que
nós, americanos, sentimos: vão ser mais respeitados, mas menos queridos.""
Um segundo argumento debatido no seminário trata do Brasil como parte dos Brics. Na
concepção americana, ser um Bric significa participar dos tabuleiros centrais para a manutenção da
ordem mundial. Para os EUA, o Brasil já está lá porque é um ator importante em temas como sistema
financeiro internacional, mudança do clima, comércio mundial, não proliferação nuclear, democracia.
"Para os americanos, se você é um Bric, está disposto a ser alicerce dessa ordem internacional, ou seja,
a pagar os custos de manter a ordem. É por isso que eles não conseguem entender por que o Brasil não
tem uma postura de condenação do programa nuclear iraniano", diz Spektor.
O terceiro grupo de argumentos diz respeito aos obstáculos à melhora das relações entre Brasil e
EUA. Há muitos ruídos na comunicação, embora ela esteja, na avaliação do professor da FGV, num momento historicamente inigualável. "De fato, nunca o diálogo foi tão fluido como agora. O Brasil é bem
recebido tanto no Departamento de Estado quanto na Casa Branca, há um genuíno interesse americano
em ouvir o que o Brasil tem a dizer, mas há conflitos de interesse reais", pondera Spektor.
Na questão da não proliferação nuclear, os dois países não conseguem concordar, por exemplo,
sobre os limites do programa nuclear iraniano. A defesa brasileira se ampara no TNP, o tratado de não
proliferação que prevê, em uma de suas cláusulas, licença para o desenvolvimento tecnológico. Os EUA
alegam que o Irã já deu provas de que esconde parte do jogo. A réplica do Brasil é que, nesse caso,
deve-se lidar com a questão da confiança sem impedir que o governo iraniano, um membro do TNP,
tenha acesso à tecnologia. A preocupação é com o precedente: o Brasil se espelha no Irã. Os
americanos acham essa argumentação hipócrita.
"Mesmo que os dois sejam a favor da não proliferação, a maneira como interpretam a letra e o
espírito do acordo é muito diferente", diz Spektor. O mesmo ocorre com o tema da democracia. Tanto o
Brasil quanto os EUA são firmemente pró-democracia. Na visão americana, porém, a Venezuela está
longe de ser uma democracia e, na brasileira, como disse o presidente Lula, há "excesso de democracia"
no país vizinho.
Cristiano Romero é repórter especial e escreve às quartas-feiras.

[Rock n Roll]

Tal grupo deveria ter sido criado após a posse de Obama. Afinal somos ou não um player ?
Em vésperas de eleições para presidente esse comunicado soa um eco muito estranho.
Grupos de estudo em campanha eleitoral ... Vejamos o que este grupo divulgará de produção em outubro, por exemplo. Perfil de candidatos ? Candidatos abordáveis ?[005]

[Marino]

PROJETO DE INTEGRAÇÃO
Instabilidade ameaça integração sul-americana
Para integrantes do governo Lula, ações polêmicas de Venezuela, Argentina e Bolívia podem
comprometer Mercosul
Eliane Oliveira
BRASÍLIA. O quadro de insegurança jurídica que paira sobre países como Venezuela, Argentina
e, mais recentemente, Bolívia é visto com preocupação pelo governo brasileiro. Mas não por risco de
contaminação da imagem do Brasil junto a investidores internacionais. O que existe hoje é o temor
velado de que o projeto de integração na América do Sul fique ameaçado, justamente no último ano de
mandato do presidente Luiz Inácio Lula da Silva, um de seus maiores fiadores.
Em uma avaliação reservada, alguns integrantes do governo entendem que uma coisa é o Brasil
se firmar como líder de um continente próspero, em ordem.
Outra é se destacar em uma região tumultuada. Ou seja, atuar em bloco com países que vêm
perdendo credibilidade em razão das personalidades de seus líderes faz com que instituições como o
Mercosul e a Unasul (União das Nações Sul-americanas) acabem perdendo força junto à comunidade
internacional.
— A estabilidade de nossa economia nos deixa tranquilos quanto à percepção dos investidores
em relação ao Brasil e a outros países vizinhos. Mas não é saudável para Mercosul e Unasul terem
economias boas e outras confusas — disse um técnico da área econômica.
Analista: Chávez ampliará confusão no Mercosul
Nas últimas semanas, o continente se viu pautado por uma grave crise institucional na Argentina.
Divergências em torno do uso das reservas cambiais para o pagamento de dívidas entre a
presidente Cristina Kirchner e o dirigente do Banco Central argentino, Martín Redrado, tornaram-se
públicas, com efeitos que poderão ser irreversíveis para a credibilidade do país, já afetado desde a
moratória, no início da década, pela falta de crédito internacional.
Somam-se a isso mudanças radicais no câmbio, feitas pelo venezuelano Hugo Chávez no fim da
semana e, mais recentemente, a possibilidade de uma nova onda de estatizações na Bolívia, em meio a
ameaças do presidente Evo Morales.
Na avaliação de técnicos das áreas econômica e diplomática, a economia brasileira já está
plenamente descolada dos arroubos que vêm sendo cometidos pelos líderes sulamericanos.
Isso vale até para outros presidentes da região com potencial de criar situações desconfortáveis,
como os do Equador, Rafael Correa, e do Paraguai, Fernando Lugo.
Para o analista político da consultoria MCM, Ricardo Ribeiro, sem dúvida o clima de tensão
política na América do Sul é ruim. Porém, com relação ao Brasil, ele concorda que, ao contrário de anos
atrás, o país é bem visto junto à comunidade internacional.
— A imagem do Brasil está muito descolada sobre o que acontece no continente. O mercado
internacional tem informações suficientes para diferenciar o Brasil — afirmou Ribeiro.
Além dos problemas na Argentina, a personalidade “voluntarista” do presidente da Venezuela
tende a atrapalhar ainda mais o Mercosul, na opinião do consultor do núcleo de negócios internacionais
da Trevisan Consultoria, José Alexandre Hage.
— A confusão vai aumentar no Mercosul com o estilo de Hugo Chávez, junto ao seu viés
antiamericano.
Investimentos podem ser redirecionados para o Brasil O especialista em comércio exterior da
Fundação Instituto de Administração (FIA), Celso Grisi, defendeu a harmonização, tendo como horizonte
o longo prazo das políticas econômicas na região, entre elas monetária e fiscal. Entre as discrepâncias
que ele vê no continente estão os índices de inflação que, na Venezuela, está em 25% ao ano.
Na Argentina, lembrou, os índices são manipulados a ponto de ninguém acreditar neles. E na
Bolívia, acrescentou, há dificuldade para fechar as contas internas e externas: — No fundo, isso pode ser
bom para o Brasil, pois restariam poucas opções para a recepção de investimentos externos na América
do Sul.
A integração econômica, observou uma fonte, deve passar, obrigatoriamente, pelo alinhamento
político. E as propostas do Brasil devem seguir o princípio da não intervenção em assuntos internos.

[gaitero]

Brasil quer criar conselho na América do Sul para resolver crises políticas

Sergio Leo, de Brasília

Os desdobramentos internacionais e regionais das crises políticas na região sul-americana devem levar o Brasil a propor aos países vizinhos a criação de um novo conselho regional, o Conselho de Paz e Segurança da América do Sul, informou ao Valor o ministro de Relações Exteriores, Celso Amorim.

"Temos esse esforço todo de criação de confiança, com o Conselho de Defesa da Unasul, temos o Conselho de Defesa e o Conselho de Combate ao Narcotráfico, devemos trabalhar intensamente na questão de paz e segurança na região", comentou Amorim, ao revelar que cogita a criação do novo conselho, para tratar dos desdobramentos políticos relacionados aos problemas de segurança dos países da Unasul. "Na região, há ideias parecidas", comentou.

Amorim não deu detalhes do projeto, que será discutido com os governos sul-americanos, mas indica que as discussões no novo conselho cuidariam dos atritos provocados entre países andinos devido à atuação das guerrilhas colombianas, divergências como os bloqueios de fronteira entre Argentina e Uruguai ou ameaças à integridade dos países.

"Tudo tem seu lado político, os países, na prática fizeram isso (as tarefas de um futuro conselho) na crise da Bolívia e em outras situações", menciona Amorim, fazendo referência à ameaça de separatismo ocorrida, no ano passado, na Bolívia, após uma crise política provocada pela disputa em torno da nova constituição do país. Os atuais conselhos da Unasul seriam "mais técnicos", com alcance limitado para discussão intergovernamental das ameaças à paz e à segurança, argumenta.

Amorim acredita que, apesar dos atritos políticos entre os países da região, o Conselho de Defesa da Unasul tem servido para aproximar os governos. Ele dá como exemplo a decisão da Colômbia de formalizar, em documento ao Conselho, os compromissos assumidos contra o uso de suas bases militares para ações fora de suas fronteiras. Segundo notou o ministro, o compromisso mencionou, de maneira inédita, que o governo colombiano assumia formalmente as declarações das autoridades da Colômbia feitas à imprensa sobre o tema. "Não resolve todos os problemas, há questões psicológicas, mas já se avançou muito", diz, otimista.

Do ponto de vista econômico, uma das prioridades do governo neste ano, segundo Amorim, é fazer um diagnóstico completo das razões para a queda nas exportações brasileiras para os países do continente. Em 2009, as exportações brasileiras para a América Latina e Caribe caíram 32% e foram verificadas quedas de 30% nas vendas ao Mercosul e de 33,7% aos demais países da região.

"A América do Sul sempre será prioridade sob esse aspecto, temos de pensar mais profundamente como estar mais presente", comentou o ministro, que quer ver análises detalhadas sobre o efeito da crise econômica e da maior competitividade chinesa sobre o desempenho das vendas de empresas brasileiras à região. Amorim acredita que o país também não pode descuidar das iniciativas voltadas à África, onde empresas brasileiras têm encontrado boas oportunidades, e ele vê grande espaço para a cooperação, inclusive com terceiros países como Estados Unidos e as nações europeias.

O governo pretende mudar a política em relação à China, que, no ano passado, passou a ser o principal mercado para os produtos brasileiros e o segundo maior fornecedor do Brasil, só atrás dos EUA. "A China tem de aprofundar o sentido de nossa parceira estratégica", diz Amorim. "O Brasil não pode ter uma parceria em que praticamente só vende commodities e compra manufaturas", diz ele, que não prevê atritos com os chineses.

"Eles entendem isso, temos de fazer grande esforço para grandes investimentos de conteúdo tecnológico no Brasil", argumenta. O Brasil tenta marcar com os chineses uma reunião da Cosban, a comissão de alto nível entre os dois governos, para discutir esse tema. A intenção dos brasileiros é realizar a reunião em abril, talvez coincidindo com outro encontro, o dos Brics - Brasil, Rússia, Índia e China. O encontro dos Brics, a ser realizado no Brasil, provavelmente em Brasília, depende ainda de confirmação dos outros países.

Estive falando com MU, quando na ocasião de uma reunião do PMDB aqui no Parana...

E no tocante ao desenvolvimento militar Latino, ficou claro que, de modo a tornar nosso continente apto e avançado às pretenções maiores de grandes grupos externos, e também no tocante ao acordo militar e a criação do conselho de defesa... Cabe aos latinos em primeiro lugar, encontrar parceiros e industrias militares latinas aptas a entrar no campo de cooperação, para promover o desenvolvimento, alinhado à independencia deste continente a tecnologias basicas e de grande importância a todas as nações latinas, e em segundo plano, tornar o conselho uma janela de transparência entre as nações latinas, para conciliar as grandes divergências históricas dos povos, de modo a alinha-los em prol de um objetivo maior, que é o de desenvolver o continente, reduzir os indicies de pobreza e organizar os sistemas energéticos e de logística, de modo a alavancar este desenvolvimento...

[FOXTROT]

Israel confirma atentado a bomba contra seus diplomatas na Jordânia
14 de janeiro de 2010 • 16h32 Comentários
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Notícia
terra.com.br


O Ministério das Relações Exteriores de Israel informou que diplomatas do país foram alvo hoje de um atentado a bomba na Jordânia que não deixou vítimas.
A bomba explodiu a cerca de 20 quilômetros da fronteira entre os dois países no Vale do Jordão, e quase atingiu um grupo de veículos onde estavam os diplomatas, que seguiam em direção a Israel.

No comboio, que havia partido de Amã, viajavam quatro funcionários israelenses e dois seguranças, mas não estava o embaixador de Israel na Jordânia, Danny Devo.

Egito e Jordânia são os únicos países árabes que mantêm relações diplomáticas com o Estado judeu.

[Rock n Roll]

Ainda na AL e sobre a insegurança jurídica. Fica patente nos exemplos abordados na notícia a tendência ao caudilhismo dos citados. Sob qualquer justificativa trata-se, em todos os casos, de desvios cometidos por governos populistas, e cada vez menos democráticos.

O que já se começa a perceber são discretas tendências à direita no Chile e Peru. O que pode complicar a integração ainda mais. Não interessa ao Brasil participar de "assembléias" que se transformam em palanque para populistas. Tanto no caso Venezuelano como no caso argentino, vemos as contas dos governos descontroladas. Ambos com fragilidades nos fundamentos econômicos; Além dos problemas jurídicos.

No caso venezuelano o desabastecimento é um fantasma e uma realidade, com potencial extremamente explosivo. Não há garantias jurídicas que mereçam tal nome hoje em dia na Venezuela, as fontes disponíveis de informação já são por demais polarizadas para se saber qual a magnitude dos problemas de fato por lá, e a possíveis reações da população. Trabalho para a ABIN.

O caso argentino é mais emblemático. Quem exerce o poder de fato? Qual a profundidade e amplitude da crise econômica e institucional na Argentina ?
Fazer com que a justiça reconduza um ministro demissionário ao cargo, por discordar de uma determinação presidencial que lança mão das reservas em moeda estrangeira do país ?
Há algo mais sério e grave nesta situação institucional, que pode gerar um imbróglio jurídico com desfecho político indeterminado.

Para nós brasileiros fica a visão cada vez mais clara da importância do Ministério Público para o país.
Também evidente para outros países que a AL ainda é frágil no âmbito de instituições republicanas, que garantam governos cada vez menos autoritários e menos corruptos. Pressupostos indispensáveis para relações diplomáticas e comerciais. Apesar das dificuldades que conhecemos internamente a figura do Brasil é a "descolada" da realidade da AL.

[Rock n Roll]

Haiti. Diante de uma tragédia sem precedentes há uma inédita mobilização de caráter humanitário que não me recordo de ter visto.
A reconstrução será assunto mais delicado. O Haiti fica práticamente no centro do Mar das Antilhas. Quem deve assumir a postura de consolidação da soberania do país até que o governo tenha como agir por si ?
Posição estratégica privilegiada, sobretudo as distâncias de vôo até o litoral de Colômbia e Venezuela, minutos até Cuba, um pouco mais até a América Central e Canal do Panamá, além de todo o litoral americano do Golfo e Flórida.
Será que deveria ser a sede da OEA ? Mais do que a solidariedade e o pesar sobre a devastação , a reconstrução do Haiti e a recuperação do Estado do Haiti deverá ser acompanhada com lupa.

[Marino]

CHILE
Santiago tenta reverter imagem armamentista
DO ENVIADO A SANTIAGO
Uma das fontes de informação mais consultadas da internet, a enciclopédia colaborativa
Wikipedia define o Chile como "um dos países do mundo com maior gasto militar em relação ao PIB" -
3,4% em 2007, segundo grupos especializados.
É para reverter essa imagem que o governo Michelle Bachelet lançou ontem a terceira versão do
"Livro da Defesa Nacional", que detalha políticas do setor e reconhece gasto de "apenas" 1,7% do PIB
em 2008. "O Chile é um país amante da paz, que só usará meios militares em legítima defesa", disse ela.
As compras militares chilenas crescem a partir de 2004, com aumento dos aportes da Lei do
Cobre -que destina às Forças Armadas 10% do dinheiro das vendas do principal produto de exportação
do país.
Os gastos são vistos com desconfiança pelo Peru, que processa um militar peruano por vender
dados a militares chilenos. A crise, desatada em novembro, esfriou -o embaixador do Peru no Chile foi
ontem ao lançamento.
O Chile é considerado o país sul-americano que mais gastou com armas de 2000 a 2008, mas
diz que grupos internacionais incluem gastos policiais na conta.